Escaleras al cielo ; Capítulo 7

Al terminar nuestra conversación, me quedé totalmente bloqueada, no sabía qué hacer, qué pensar, cómo actuar. Sara era mi amiga, y no podía dejarla tirada, al fin y al cabo, soy la persona más cercana a ella y a Jorge que les pueda ayudar.

El resto de las clases,  las pasé con las chicas en los cambios de horas y también, algunas visitas inesperadas de Jorge. Se me pasaron rapidísimos hasta que al fin, tocó la sirena para ir directa a casa tras despedirme de las chicas e reunirme con él.

-          Jorge… ¿qué te parecen mis amigas?

-          Me han caído bien… ¿porqué preguntas?

-          Y Sara, ¿qué te parece?- ahí me di cuenta de que fui un poco descarada.

-          Pues no me parece nada, verás no sé, es simpática y eso por si quieres saber eso jajajaja

-          Tonto eres… jajaja

Esto iba a ser realmente una tontería, así que dejé el tema hasta que llegamos ya hasta la plaza, y nos fuimos cada uno a su casa.

Nada más llegar, Sara llamó a mi casa ya que le dije que a la salida hablaría con él. Le dije lo que pensaba Jorge de ella por poco que fuera, y de nuevo, me volví a comprometer en seguir ayudándola por estúpido que fuese.

Al poco tiempo de que colgásemos, me conecté al facebook y estuve hablando con Rachel, me preguntó por Sara y por Jorge, ya que ella también había notado la gran obsesión que tenía ella, y no pude hacer otra cosa que contarle lo que me pidieron que hiciera y como no, los sentimientos de Sara, aunque la verdad, no sabía si hice bien al contarlo…

Rachel tras habérselo contado me dio una gran idea, mañana era viernes y suponía que íbamos a salir todas juntas, así que hicimos un plan que se trataba en decirle a Jorge que se viniera su grupo con nosotras, así estarían juntos y se podrían conocer mejor.

Su idea sonaba bastante bien, al menos tenía a Rachel para ayudarme y quizás podría contar con las demás. Apagué el ordenador, cené y preparé las cosas para irme a dormir.

…

Todo era blanco, empecé a correr para ver, supongo, si había alguien más. Al fondo, se podía observar con claridad unas escaleras y de repente, alguien apareció, no se le podía ver la clara con claridad, subió las escaleras, se giró y me miró.

Desperté.

Otra vez, ese maldito sueño, llevaba soñándolo 4 días seguidos, la misma historia, punto por punto, ¿qué significaría?

De nuevo, intenté no darle importancia y pasar del tema.  Hoy tenía que tener las ideas claras y hablar con Jorge para quedar esta tarde, me arreglé y salí deprisa de mi casa.

-          Jorge, ¿qué vas a hacer esta tarde?

-          Pues supongo que salir con mis amigos por el centro, aún no losé lo íbamos a hablar hoy, ¿porqué?

-          Bueno es que, he pensado en si podríamos salir nosotras con ustedes, podríamos pasarnos por el Starbucks o algo, ¿qué te parece?

-          Lo que quieras, yo hablo con ellos hoy a ver qué me dicen.

-          Si no quieres no importa de verdad, era para que estuviéramos todos y conociera a más gente.

-          Claro que quiero tonta, y más si es contigo.

Inevitablemente, sonreí y llegamos al instituto.